Castellvell del Camp

Castellvell del Camp es un pueblo pequeño en extensión, pero de privilegiada ubicación. Tiene una extensión de 5'3 Km2, la mayoría bien empinados. 

El núcleo de población, situado en la entrada del término y a los pies de la colina que corona la ermita de Santa Anna, se encuentra a tan solo 227 m de altitud, mientras que el punto más bajo se alza a 160 m.

El lugar más conocido por la gente del pueblo, es el Puig de l´Àliga (302 m), también llamado “Muntanya del Pal" o Puget.

El municipio está flanqueado, de una parte, por el Barranco del Roquís y, por otro, por el Barranco de las Roquetes. El Barranco de la Vidaleta limita el pueblo por el este.

El núcleo de población está constituido también por las siguientes urbanizaciones: Castellmoster, El Pinar IV Fase, Flor del Camp, Les Erboceres, Partida de les Serres, els Pugets y les Planes del Puig.

A pesar de que antiguamente Castellvell del Camp era un pueblo eminentemente agrícola, dedicado al cultivo de la avellana y el aciete, actualmente se ha convertido en una zona predominantemente residencial. La proximidad a Reus  y las maravillosas vistes sobre el Camp de Tarragona, han llamado la atención de muchos y muchas reusenses a fijar su residencia en las urbanizaciones construidas en las colinas que rodean el municipio. Durante los últimos años, ha sufrido un fuerte aumento de población, la cual cosa también ha llevado a una creación y mejora de  servicios públicos.

Aún así, el núcleo urbano antiguo conserva el encanto de los pequeños pueblos. Acurrucado a los pies de la colina de Santa Anna, el Castellvell más tradicional desvela sus pequeños encantos en la subida a Santa Anna, la Font nova, la iglesia de Sant Vicenç Màrtir o en las viejas arcadas de Cal Tramuntà.

La actividad agrícola aún se mantiene, sobre todo gracias a la producción de aceite (DO Siurana) y a la muy buena tarea que desarrolla la Cooperativa Agrícola de Castellvell y su Caja Agraria.