Vilaplana yace al pie de las Montañas de Prades, contemplado desde arriba por la aldea deshabitada de la Mussara. Los dos pueblos, sus riscos imponentes y sus valles nos ofrecen rincones de gran belleza, rincones que fueron también refugio de guerrilleros. Uno de ellos, el caudillo carlista Cercós, murió en la cueva llamada «l'Hospital dels Carlins», y fue enterrado a escondidas en el cementerio de la Mussara. Dice la leyenda que el odio que suscitaba entre sus enemigos liberales provocó que un grupo fuera al cementerio y, al no conseguir encontrar la tumba, fusilara simbólicamente una de las cajas donde estaba enterrada la abuela Boronada.
Salimos del pueblo de Vilaplana en dirección al camino de las Tosques, marcado como PR y en buena parte empedrado, y subimos por la montaña, por lo que cruzamos el barranco varias veces. Llegamos a la Mussara, con la Punta de les Airasses como mirador privilegiado de la Costa Daurada. De Airasses bajamos hacia el camino de los Masos y seguimos planeando hasta que encontramos el apeadero hacia el camino de los Garrigots, que nos llevará de vuelta al pueblo, descendiendo por los imponentes riscos del valle fértil.
Tiempo: 4:50 h.
Dificultad: Baja
Apta para familias: Sí
Btt: No
Ruta circular: No
Municipios:
Distancia total: 15.4 km
Ascenso: 600 m
La red de caminos del Baix Camp os permite descubrir nuestro territorio a un ritmo tranquilo, disfrutando del paisaje, de sus pueblos y de su gente.